Dicen que un nuevo empleado necesita entre 8 y 12 meses para ser tan productivo como sus compañeros. ¿Cómo agilizar esos plazos? La inducción de personal tiene la respuesta para esto y para mucho más: vale para reducir la rotación, reforzar la cultura corporativa, mejorar la adaptación del nuevo empleado, etc. Y de paso, se puede adaptar al trabajo en remoto a través de las herramientas tecnológicas adecuadas. En esta infografía incluimos definimos las 6 prácticas con las que conseguir una inducción de personal ganadora.